Tres monumentos imprescindibles en un viaje de fin de curso a Praga
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¿Quién no desea realizar un viaje de fin de curso a Praga? Entre todos los destinos que ofrecemos a nuestros estudiantes, la República Checa suele ser uno de los más demandados y, sin duda alguna, el que más encantados deja a sus visitantes. En el artículo de hoy queremos contaros qué tres monumento de la zona viaje de Praga no os podéis perder bajo ningún concepto. ¿Os quedáis para conocerlos con nosotros?
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Un poco de historia sobre la Ciudad Vieja de Praga
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Cualquier viaje de fin de curso a Praga comienza visitando la parte y zona más antigua de la ciudad: Staré Mesto o Ciudad Vieja. Aquí fue donde comenzó a surgir la ciudad de Praga hasta que, alrededor del siglo XI, los habitantes de la urbe comenzaron a ampliar sus fronteras y se configuraron las diferentes partes que hoy conforman la ciudad: Malá Strana, Hradcany, Josejov, Nové Mesto y Vysehrad. Esta zona de Praga es la más medieval y la que, posiblemente, más encanto histórico tenga.
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Monumento 1 – Plaza de la Ciudad Vieja
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Si tuviéramos que elegir unas cuantas plazas de una belleza incalculable en Europa, entre ellas estaría esta. Aquí, a golpe de vista, encontraréis importantes monumentos de la ciudad como, por ejemplo, la Iglesia de Nuestra Señora de Tyn del siglo XIV o el Ayuntamiento de la Ciudad Vieja.
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Monumento 2 – Reloj Astronómico de Praga
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En la plaza que os hemos indicado anteriormente, ubicada en la Ciudad Vieja, se encuentra el reloj más famoso no solo de la República Checa sino de toda Europa. Al menos durante el siglo XV fue el reloj que todo el mundo quería ver, por eso Praga se convirtió en una ciudad donde las rutas comerciales hacían siempre una parada obligatoria, ya que todos los comerciantes querían disfrutar de él. De hecho, cuenta la historia que su creador, un relojero llamado Hanus, quedó cegado cuando los gobernantes de la ciudad le preguntaron si sería capaz de hacer una réplica exacta. Ante la respuesta positiva de Hanus, los gobernantes le arrancaron los ojos para que ninguna otra ciudad pudiera arrebatar a Praga el prestigio de tener un reloj de tal calidad.
Como algunos ya sabréis, el reloj escenifica el Día del Juicio Final, por lo que un precioso desfile de la Canina y los 12 apóstoles entretienen a los viandantes que pasan en horas exactas desde las 8 am hasta las 21 pm. Y sí, se puede subir por unas 80 coronas (precio para estudiante). ¡No podéis obviar esta visita en un viaje de viaje de curso a Praga!
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Monumento 3 – Clementinum
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Después del Castillo de Praga, el Clementinum es el edificio más amplio de la ciudad. Por lo tanto, ¿os lo queréis perder en un viaje de viaje de curso a Praga? En su momento, se levantó este edificio para dar cabida a un colegio de jesuitas y a su universidad, pero desde entonces han sido diferentes los cometidos designados a este edificio. Por ejemplo, durante el siglo XI acogió la sede de los dominicos e hicieron de él un monstaerio. Su uso actual es el de Biblioteca Nacional de Praga y, a su vez, sirve de espacio para dar conciertos clásicos.
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