A la hora de realizar un viaje fin de curso surgen las dudas sobre qué tipo de ropa y complementos deben llevar los estudiantes. Por lo general, los viajes fin de curso suelen realizarse en fechas estivales, es decir, desde mayo hasta julio, por lo que estaremos hablando en casi todos los casos de ropa fresca, ligera y zapatos cómodos y descubiertos.
Para los viajes que se realicen en marzo y abril aconsejamos que se lleven pantalones largos y partes de arriba de manga larga pero ligera, para poder cubrirnos con chaquetas estilo plumas (ocupan poco en la maleta y abrigan mucho en caso de bajadas de temperatura).
Para los viajes que se realicen a partir de mayo en adelante y tengan como destino países como Malta, Francia, Alemania, Praga y demás, aconsejamos que se lleve ropa de verano (shorts, sandalias, etc.) y que se añada a la maleta un pantalón largo, un calzado cubierto, un pañuelo y una chaqueta tipo cazadora vaquera.
Para los viajes al Reino Unido e Irlanda que se realicen en primavera/verano es altamente recomendable llevar un paraguas de mano, un chubasquero ligero y zapato cubierto, debido a que en esta época es cuando más suele llover.
Nunca está de más echar en la maleta algún complemento para cubrir la cabeza tipo visera, gorra, gorro, pañuelo y similar, pues los jóvenes pasarán mucho tiempo al aire libre conociendo la ciudad de su destino de viaje fin de curso. Igualmente, equiparlos con gafas de sol es muy recomendable.
Que los estudiantes dispongan de crema solar es también de vital importancia, pues en los destinos de viajes fin de curso suelen darse las actividades al aire libre en zonas de playa, campo, etc.