Asturias alberga monumentos y rincones con siglos de historia. En Oviedo, su capital, destacan la Catedral de San Salvador, la Plaza del Fontán y las iglesias prerrománicas como Santa María del Naranco y San Miguel de Lillo. En la costa, Gijón ofrece el Cerro de Santa Catalina con la escultura Elogio del Horizonte, y en los Picos de Europa, la Basílica de Covadonga es un lugar de peregrinación con un gran valor histórico.
Gastronomía local: Platos típicos asturianos
La gastronomía asturiana es famosa por sus platos tradicionales y su sabor auténtico. El cachopo, una gran pieza de ternera rellena de jamón y queso, es uno de los platos más icónicos. La fabada asturiana, elaborada con fabes, chorizo y morcilla, es otro imprescindible. Además, no puede faltar la sidra, bebida tradicional que se escancia en los chigres para disfrutarla en su punto óptimo.
El clima y la mejor época para visitar
Asturias tiene un clima oceánico, con temperaturas suaves durante todo el año. La mejor época para visitarla es en primavera y verano, cuando el paisaje está en su máximo esplendor y el clima permite disfrutar de rutas y playas. En otoño, los bosques se tiñen de colores espectaculares, creando un ambiente único para excursiones al aire libre.
Detalles curiosos y peculiaridades de la región
Asturias es una región llena de historia y tradiciones. Su capital, Oviedo, ha sido una de las principales paradas del Camino de Santiago desde la Edad Media. En Gijón, la cultura marítima está muy presente, con un puerto activo y una fuerte vinculación con la pesca. Otro detalle interesante es la cantidad de hórreos (graneros elevados de madera), que forman parte del paisaje rural y son símbolo de la arquitectura asturiana.